LA CLAVE PARA LA SEGURIDAD

El mantenimiento preventivo es el pilar fundamental para garantizar la seguridad y fiabilidad de un ascensor. Consiste en la revisión periódica de todos los componentes del sistema, desde cables y poleas hasta sistemas electrónicos y botones de control. Un mantenimiento adecuado permite detectar signos de desgaste o fallas potenciales antes de que se conviertan en problemas graves. Es importante que las revisiones sean llevadas a cabo por técnicos capacitados que sigan un protocolo establecido por los fabricantes. De esta manera, se reduce significativamente el riesgo de accidentes y paros inesperados. Además, un programa de mantenimiento preventivo puede extender la vida útil del ascensor, optimizando el retorno de la inversión y garantizando la seguridad de los usuarios.